Eucaristía por los Quince Años de María Paula Rossi Hernández, 25 de marzo de 2017
¡Muy buenas tardes tengan
todas y todos! Hoy nos encontramos
reunidos en la Casa del Señor para dar gracias a Él por la vida.
Primeramente,
agradecemos a Dios por María Paula Rossi
Hernández, quien cumple Quince años de vida. Amorosa y animosa, esta devota
hija de Nuestra Señora de la Candelaria, es estudiante de … . Alegre y amiga de
bailar, María Paula no es por eso menos sensible o poco profunda. Valora la
vida y responde con solidaridad ante las diversas situaciones que se le
presentan.
Acompañan a María
Paula en esta tan especial acción de gracias muchas personas muy amadas;
especialmente su abuelo, Carlos Alfonso Hernández Mogollón, y quieren agradecer
a nuestra Madre María Santísima ese sí que hizo posible la Encarnación del
Verbo Divino, Jesucristo, en sus purísimas entrañas.
María
Paula, como comunidad parroquial tus padres, abuelos y demás familiares y
amigos han querido que éste sea un momento trascendente que te lleve a decirle
al Señor –como María, la Virgen de la Encarnación- que quieres vivir para seguirlo –con todo y cruz-, sirviéndolo
en quienes te necesiten para, así, ser dichosa.
Con
profunda alegría pongámonos de pie para iniciar esta celebración.
MONICIÓN
A LAS LECTURAS
Pasando por la profecía de Ajaz, que
anunciaba el embarazo de ‘la virgen’ que daría a luz al Dios-con-nosotros, repetiremos
con el salmista: ‘Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad’ y presenciaremos
el diálogo trascendental entre el enviado divino, Gabriel y María, que daría
paso al cumplimiento de la tan esperada profecía con el ‘sí’ consciente de la
jovencita. Buen momento para preguntarnos cómo va nuestro diálogo con Dios y
nuestra aceptación de Su Voluntad en nuestras vidas.
ORACIÓN
DE LOS FIELES
En breves momentos Cristo se hará presente
en su Cuerpo y en su Sangre para todos nosotros, elevemos al Señor las intenciones que hay en
nuestros corazones:
1. Por
la Iglesia que Cristo fundó, para que sea testimonio de la construcción de su
Cuerpo, con los que sufren a causa de otros o carecen de lo más necesario, para
que les acompañe y ayude. ROGUEMOS AL
SEÑOR.
2. Por
nuestro Papa Francisco, para que,
fortalecido por el Espíritu Santo, sea fiel cumplidor de la misión que el mismo
Jesús le encomendó en nombre del Padre eterno.
ROGUEMOS AL SEÑOR.
3. Por
todos los sacerdotes, religiosos y religiosas que, desde sus propias
limitaciones pero con la Gracia de Dios, nos dan su ejemplo y la orientación en
la fe que necesitamos. Consuélalos y fortalécelos, Señor, en sus tribulaciones
y debilidades personales. Que siempre
respondan ‘sí’ a Dios. ROGUEMOS AL
SEÑOR.
4. Por
María Paula, para que sepa vivir el llamado que en este día tan especial de sus
Quince Años le hace el Señor a servirle y dejarse acompañar y guiar por Él en
todo momento. ROGUEMOS AL SEÑOR.
5. Por
sus padres. Por su abuelo. Para que animen y acompañen a María Paula en su
peregrinar, como Pequeña Iglesia
Doméstica que son, y se conviertan en luz para quienes comparten sus vidas.
ROGUEMOS AL SEÑOR.
6. Por
todos los familiares, amigos y conocidos de María Paula que ya no están
físicamente con nosotros; para que todo
el amor que hayan sembrado se transforme en frutos de vida cristiana y
felicidad verdadera para todos. ROGUEMOS AL SEÑOR.
7. Por las intenciones personales de
todos los aquí reunidos. ROGUEMOS AL
SEÑOR.
MONICIONES
DEL OFERTORIO
En este día tan significativo de los
Quince Años de María Paula, Señor, te presentamos estas ofrendas para alabarte:
1. LUZ
Señor, Tú eres la Luz del mundo, por eso te entregamos nuestro deseo y nuestro
compromiso de que la vida de cada uno de nosotros siempre esté bañada por tu
Luz.
2. FLORES
En estas flores se entrega la vida
que crece generosa por todas partes. Por eso, Señor, en ellas te damos gracias
por la vida y te pedimos que la transformes con el rocío de tu Espíritu.
3.
ORACIÓN
Este
Rosario representa, Señor, nuestras
oraciones y nuestro deseo de imitar a María, dentro de quien Tú viviste. Se te entrega, también, el tierno amor de quien
se reconoce hija de María.
4.
ALIMENTOS
Expresión de sacrificio y donación
personal, se entregan estos alimentos
para compartir y aligerar la cruz de nuestros hermanos más necesitados.
5. NUESTRA HISTORIA
María Paula no está sola, Señor.
Dondequiera que transcurra su vida, allí también habrá de contarse su HISTORIA PERSONAL, la cual comparte con
muchas personas (familiares, unos; amigos, otros; conocidos, la mayoría) y que
hoy queremos entregarte en cada uno de estos amigos y familiares. ¡Estamos
seguros que Tú la bendices!
7.
CÁLIZ Y VINAJERAS
Necesitamos alimentarnos, Señor. A
veces creemos que solo el cuerpo requiere ese alimento, olvidando que, aunque
no la vemos, nuestra alma también debe ser nutrida y fortalecida con el mejor
de los manjares. Presentamos y recibimos el
pan y el vino donde creemos que Tú, Señor, te nos entregarás como alimento
para el alma y fortaleza en nuestro caminar.
Por todo esto, ¡GRACIAS, Señor!
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